Planta de cemento de Ancap en Uruguay se encuentra paralizada

Hace dos meses, la planta de cemento de Ancap, ubicada en las cercanías de la ciudad de Minas, no produce debido al incumplimiento en contratación de personal.

De acuerdo a la versión de la Federación de Trabajadores de ANCAP (Fancap), “la parada del horno y por consiguiente la interrupción en la fabricación de clinker (principal elemento constitutivo del cemento Pórtland) se debe a la falta de personal en áreas operativas”.

Actualmente, la empresa abastece la demanda del cemento de Ancap con la producción de la planta de Paysandú. El año pasado trabajaban allí 245 personas de las cuales 140 estaban en la plantilla. Mientras en Paysandú trabajaban 300 personas el año pasado, de las cuales 175 son trabajadores propios de Ancap.

El sindicato asegura que hace “mucho tiempo” que se viene denunciado la falta de personal. En 2016, el sindicato firmó un acuerdo con el Directorio de la empresa que permitió el “pasaje” provisorio (seis meses) de personal del área técnica a las áreas de operaciones y laboratorio como la única alternativa que asegurara la continuidad de la producción en la planta en Minas. “En dicho período, ANCAP se comprometió a subsanar la problemática de falta de personal”.

“Claramente llegada la fecha, no solamente se incumplió con lo acordado, sino que se reconoció la carencia de personal al solicitarle al sindicato la prórroga del acuerdo con la promesa inicial. Promesa que a la fecha sigue siendo eso: promesa”, cuestiona el gremio de Fancap Minas.

Por su parte, el director de la empresa, Diego Labat, afirma que Ancap había llegado a un pre-acuerdo con la Fancap; pero los trabajadores de la planta de Minas lo rechazaron.

La falta de actividad en Minas genera costos importantes para Ancap, consideró Labat. Ancap debe competir con la Compañía Uruguaya de Cemento Pórtland (“Cemento Artigas”), de capitales españoles, también ubicada en Lavalleja y tendrá que hacerlo más adelante con la fábrica que está construyendo un grupo brasileño en el departamento de Treinta y Tres. A su vez, otra empresa importa el producto bajo la marca “Charrúa”.

El año pasado Ancap había logrado no tener que comprarle producción a “Cementos Artigas” para atender su demanda, pero este año tendrá que volver a hacerlo “en cualquier momento”, consideró Labat.

Fuente: El País y el Observador

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