Brasil: São Paulo brinda detalles sobre el túnel Santos-Guarujá

El proyecto del Gobierno de São Paulo para la construcción de una conexión seca entre las ciudades de Santos y Guarujá prevé un túnel de 870 metros de longitud instalado bajo el mar. Con una profundidad de 21 metros, este será el primer túnel en América Latina realizado con este modelo. Actualmente, la travesía se realiza mediante ferry o unos 40 kilómetros de carretera.

El gobernador Tarcísio de Freitas anunció en Brasilia (DF) la apertura de una consulta pública sobre el proyecto del túnel Santos-Guarujá, que recogerá sugerencias y aportes de la sociedad civil para mejorar el proyecto.

La próxima etapa será la publicación del anuncio y, posteriormente, la subasta de la asociación público-privada (APP) entre el Gobierno de São Paulo, la Unión y el futuro concesionario. El evento está previsto para finales de este año.

El túnel Santos-Guarujá estará compuesto por seis módulos prefabricados de hormigón que se construirán en dique seco. Luego, los módulos se “sumergirán” en agua para realizar pruebas de sellado e impermeabilidad. Una vez listas, las piezas serán transportadas flotando hasta el lugar donde se instalará el túnel en el fondo del océano.

Este nuevo enlace o túnel conectará las regiones de Outeirinhos y Macuco, en Santos, con el barrio Vicente de Carvalho, en Guarujá. El estudio de movilidad del proyecto concluyó que la ubicación más adecuada para el túnel es el centro del canal, satisfaciendo las necesidades logísticas de la región.

El proyecto también permitirá la integración de los sistemas de transporte público de la región. Además del paso de vehículos, el túnel contará con una zona de circulación para ciclistas y peatones instalada entre los seis carriles -tres carriles por sentido, uno de los cuales adaptable a VLT (Vehículos de Tren Ligero).

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Pasos de construcción

1. Preparación del suelo: El primer paso es preparar el fondo del canal donde se instalará el túnel. En el lugar se excava una zanja para albergar los módulos que formarán la estructura. También se instalarán losas de hormigón en la zanja para soportar los elementos del túnel.

2. Construcción: Los elementos del túnel son piezas de hormigón construidas en dique seco, preferentemente cerca de donde se ubicará el túnel. Los elementos cuentan con piscinas temporales en su interior. Los depósitos impiden al principio que la estructura se hunda en el agua.

3. Transporte: Cuando las piezas están listas, se someten a pruebas de sellado e impermeabilidad. Posteriormente se inunda el varadero. Gracias a las piscinas temporales, los elementos flotan para ser transportados por remolcadores hasta el lugar donde se ubicará el túnel.

4. Posicionamiento: Los elementos se fijan a puentes flotantes y se posicionan mediante sistemas electrónicos en el punto exacto donde deben sumergirse.

5. Sumersión: El agua presente en las piscinas temporales del interior de los módulos se bombea sumergiendo lentamente los elementos del túnel. Este proceso es monitoreado por sensores.

6. Conexión de elementos: Mediante tornos hidráulicos se juntan los elementos hasta ponerlos en contacto entre sí.

7. Atraque: La unión final de los módulos de túnel adyacentes se realiza por la diferencia de presión atmosférica en el interior del elemento ya colocado y la presión que ejerce el agua sobre el nuevo elemento.

8. Nivelación: En un extremo del elemento se anclan gatos hidráulicos que mueven pasadores de acero para nivelar el módulo. Se sueldan los pasadores y se retiran los gatos hidráulicos. Luego, se inyecta arena en la base, formando un “cama” para asentar el elemento del túnel.

9. Protección: Finalmente, se utiliza una capa de piedras para cubrir y proteger el túnel contra impactos de embarcaciones y enganche de anclas sueltas.

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El túnel

El proyecto del túnel sumergido prevé una inversión total de R$ 5960 millones (USD 1192 millones aproximadamente al cambio actual). De ese total, el 86% debería provenir de aportes públicos divididos en partes iguales entre el Gobierno de São Paulo y la Unión, además de la participación del sector privado.

El futuro socio privado será responsable de la construcción, operación y mantenimiento del túnel Santos-Guarujá, lo que solucionará uno de los mayores cuellos de botella logísticos del país. La conexión entre las dos principales ciudades de la Baixada Santista permitirá el tráfico de vehículos de pasajeros, camiones y transporte público, así como de bicicletas y peatones por vías segregadas. La solución vial también amplía las posibilidades de desarrollo y ampliación del Puerto de Santos.